No te voy a engañar. Termino esta selectividad con sensaciones agridulces (como todos los años) |
La gran mayoría consiguieron sus objetivos y eso me alegra muchísimo, y es genial recibir mensajes de agradecimiento de sueños cumplidos, pero este es mi trabajo y es lo que se supone que tiene que ocurrir. |
Al mismo tiempo, en esta ocasión dos de nuestros alumnos no consiguieron esa nota cercana al 13,5 que se habían propuesto. Para mí los dos mejores de la promoción. |
Estudiantes de sobresaliente, realmente brillantes, sacando tanto en el instituto como en los exámenes de la academia muchos dieces. |
Y lo más curioso ¿Fallaron en alguna asignatura en concreto, matemáticas quizás por la dificultad del examen? NO, fallaron en todas las asignaturas (en este caso la palabra fallar significa que no consiguieron el 10, quizás un 7, 8, 9, pero no el 10) |
¿Qué ha ocurrido?. Pues algo que, tanto profesores de instituto como profesores de la academia, quizás por conocerlos, por su brillantez, por su participación en las clases, como hacen los exámenes antes que nadie, cómo están predispuestos a trabajar más que nadie… La subjetividad del profesor ante un alumno brillante y el no darnos cuenta REALMENTE de que: LAS REGLAS DEL JUEGO EN SELECTIVIDAD, CAMBIAN. |
Recuerdo como a principios de curso, en los primeros exámenes, el profesor de historia me comentó: “Uno de los chicos tiene una letra poco apropiada para sacar un 10”. |
Se lo comentas, en cada examen le haces referencia a “la letra”, pero ahora lo sé, teníamos que haber sido mucho más exigentes con este tema. |
Este mismo chico en el último examen de lengua la profesora me dijo: “hay partes del examen que no he entendido”, sacó un 7, la misma nota que en selectividad, y todo por la letra. |
Andrea… ¡Ay Andrea!. Creo que la alumna más brillante que he tenido en estos 30 años. Digo su nombre porque no hay otra igual, pero con una letra… malísima. Desde el principio se lo dije, “Andrea la letra”, no vas a sacar la nota por la letra. “Andrea la letra!!”. Andrea se ha quedado con un 12,775 y estoy convencida que por la letra. |
En selectividad no hay “Juan” o “Pedro” o “Andrea” que conoces y sabes lo buenos estudiantes que son. |
En selectividad hay un profesor delante de 100 o 150 exámenes que tiene que corregir en 2 días y en los que no se puede parar ni 10 minutos porque no “hay tiempo”. |
Mis profesores corrigen minuciosamente los exámenes y cuando algo falla después yo analizo buscando qué ha ocurrido. |
¿Sabes la primera sensación de corregir un examen con mala letra? Pues que la expresión es mala, que no están bien puestos los signos de puntuación. Ese mismo examen, cuando lo analizas y consigues entenderlo bien, lo relees y te das cuenta de lo bueno que es. |
Los correctores de selectividad, no tienen la oportunidad de releer y analizar, no tienen tiempo!! |
Cuantos estudiantes me escriben a mi Instagram diciendo: tengo bien todos los ejercicios de matemáticas y me han puesto un 8. ¿Lo has explicado bien? ¿Se entiende bien? Esa es siempre mi pregunta. |
Porque tú puedes saber mucho y hacer todos los ejercicios bien, pero ¿Ha llegado tu mensaje de forma correcta al corrector? |
Parece una tontería, pero tenlo en cuenta. Tan importante como hacer bien los ejercicios, es que el receptor del mensaje lo reciba correctamente y ahí: la letra, la organización, el ir explicando brevemente los pasos que damos es realmente importante. |
Si tienes mala letra PONTE A TRABAJARLO YA, (y no me refiero a bonita o fea, me refiero a que se entienda perfectamente), que no es ninguna tontería; haz caligrafía, escribe textos y enséñaselos a tus padres, hermanos y pregúntales…y desde luego, empieza a acostumbrarte a ir explicando tus ejercicios de matemáticas y química tal y como lo harías en selectividad. |
MECANIZA |
Hoy es 22 de julio, queda aún casi dos meses para el comienzo de curso. |
Ve interiorizando todos estos consejos que te voy a transmitir y durante todo el curso llévalos a cabo. |
Un 13,5 es la excelencia y no se consigue tan fácilmente |
Y por hoy nada más |
Gracias por leer!! |
Hasta dentro de dos semanas |
Mari Carmen Delgado |